Otro de los grandes misterios que quitan el sueño a los curiosos:
¿cómo hacen para romper la cáscara sin dañar la semilla? ¿la humedecen?
¿la secan? ¿la golpean? ¿la comprimen?
El proceso de descascarillado de las semillas de girasol —popularmente
conocidas como pipas— es el siguiente:
1. Se
secan las semillas provocando con ello el quebrado y la apertura de las
cáscaras.
2. Se
introducen en un recipiente giratorio similar al tambor de una lavadora.
3. Se
someten a un chorro de aire a presión mientras el recipiente no cesa de girar
como si estuviese centrifugando. La combinación de la presión del aire y los
golpes acaban por romper la cáscara separándola de la semilla.
4. Otro
chorro de aire a menor presión arrastra las cáscaras que pesan menos que
la semilla, que permanece.
5. Se
pasan por una criba que separa las semillas peladas de las que, a pesar del
proceso, quedaron sin pelar.
Y ya tenemos las pipas peladas. Pero… ¿no os parece que lo realmente
entretenido es pelarlas uno mismo?
sabercurioso
2 comentarios:
Querida Marta,genial, este artículo. a veces me lo he preguntado y mira por dónde esta tarde lo he aprendido. Muy interesante tu blog. te seguiré de ahora en adelante.
Me alegra que te guste Conchita. Trabajare duro para ofreceros informacion de cosas curiosas como esta. Besos curiosos :)
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